¿Y este continuo buscar su nombre en esa larga lista de desconocidos?
¿Todo esto por unas lindas palabras, una bonita despedida y un buen sabor de boca tras pronunciarla?
Es divertido.
Quizá solo necesite volver a sentir ese dolor. Ese agradable dolor...
Y ese indeseable dejará de monopolizar mi botiquín de primeros auxilios.
Pero...¿ya?
Ay pequeña, no quieras correr si no sabes hacia donde.
¿Será porque se acerca el otoño y no quiero que me pille sin abrigo?
Y que escuche cómo crujen las hojas bajo mis zapatos....
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