Lujuria y Orgullo están haciendo el amor en mi cama.
Me han invitado pero... estoy cansada de sus juegos.
Mientras, me atiborro de dulces.
Ya van tres pecados capitales...
Sí, es posible.
Sentimientos transformados en palabras que fluyen como la sangre de las heridas. Sentimientos transformados en palabras que se deslizan silenciosos como lágrimas caídas. Sentimientos transformados en palabras que hacen al corazón palpitar, a los labios sonreír, a las manos temblar... Sentimientos transformados en palabras
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