La princesa no ríe, la princesa no siente.
La princesa persigue por el cielo de Oriente
la libélula vaga de una vaga ilusión.
Rubén Darío

En aquel tiempo yo tenía el sueño de una libélula entre los juncos del corazón.
Juan Carlos Mestre

En esos momentos de encuentro
entre la luna que sale y el sol que entra
las rojas libélulas.
Haiku

~Yo escribo lírica con sonrisas, en prosa.~
Tempus fugit. Carpe Diem








miércoles, 24 de noviembre de 2010

Ontheboat

-Se te ve agobiada.
-Que sí! Que ya te lo he dicho, joder.
-Pf...Primero, no es mi culpa. Y segundo, sólo lo estaba confirmando.

Sí, es verdad. Sólo estabas metiendo el dedo en la llaga.
Porque tenías que hacerlo.

Es muy fácil mirar desde tu barca cómo me llega ya el agua al cuello.
Es muy fácil...

Suerte que sé nadar. 

Y suerte... que muchas veces viene a recogerme en su barca..


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