La princesa no ríe, la princesa no siente.
La princesa persigue por el cielo de Oriente
la libélula vaga de una vaga ilusión.
Rubén Darío

En aquel tiempo yo tenía el sueño de una libélula entre los juncos del corazón.
Juan Carlos Mestre

En esos momentos de encuentro
entre la luna que sale y el sol que entra
las rojas libélulas.
Haiku

~Yo escribo lírica con sonrisas, en prosa.~
Tempus fugit. Carpe Diem








sábado, 10 de diciembre de 2011

Justo a tiempo

Llenaba el silencio de música vacía, para no notar su ausencia, hasta que se dio por vencida.

Comenzó la caída, para hundir su cara en la almohada y ahogar sus lágrimas entre los hilos.
Entonces, una llamada.

"Justo a tiempo de impedir el gran diluvio."

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