-En realidad, me gusta donde está la Luna ahora.

El Sol está enamorado de la Luna y si me la regalaras, no podría verla nunca más.
Sentimientos transformados en palabras que fluyen como la sangre de las heridas. Sentimientos transformados en palabras que se deslizan silenciosos como lágrimas caídas. Sentimientos transformados en palabras que hacen al corazón palpitar, a los labios sonreír, a las manos temblar... Sentimientos transformados en palabras
No hay comentarios:
Publicar un comentario