La princesa no ríe, la princesa no siente.
La princesa persigue por el cielo de Oriente
la libélula vaga de una vaga ilusión.
Rubén Darío

En aquel tiempo yo tenía el sueño de una libélula entre los juncos del corazón.
Juan Carlos Mestre

En esos momentos de encuentro
entre la luna que sale y el sol que entra
las rojas libélulas.
Haiku

~Yo escribo lírica con sonrisas, en prosa.~
Tempus fugit. Carpe Diem








sábado, 15 de octubre de 2011

To miss you

Dicen que nos damos cuenta de lo que tenemos una vez ya lo hemos perdido.
Quizá sea ese uno de los principales fundamentos del funcionamiento de mi corazón. Quizá necesite "perderte un poco" para darme cuenta de lo mucho que me haces falta.
A veces, necesito tomar una pausa para sentir la Ausencia destruyendo mi interior y llenándome de vacío. Todo se sume en penumbras y se envuelve en frías nubes de nada. Es entonces cuando se produce un pequeño espasmo en el espacio, un sutil latido del tímido corazón. Un rayo rojo recorre la estancia, encendiendo con sus chispas los glomérulos cercanos. Se transmite como un impulso eléctrico  y se vuelve a apagar. Al fondo, a la izquierda, entre los pulmones, el corazón incandescente, que vuelve a latir esta vez con más intensidad.

bumbum bumbum bumbum...  La luz aumenta y me calienta desde el interior.
Eres tú y mi consciencia que me recuerda que estás.
Dondequiera que estés, estás ahí, dentro de mí, poniendo en marcha mi mecanismo.
Entonces sonrío.
-Estás aquí bien adentro, estás dondequieraqueestés.- me repito.
 Y te echo de menos.

2 comentarios:

  1. Sentir que alguien está, de forma independiente a la distancia...
    Precioso :)

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  2. Ahh aquella sensación de extrañar a alguien.
    realmente me gustó como escribes. te sigo.
    un abrazo.

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